A mi hija, la luz de mi vida, el tesoro de mi corazón, la niña más hermosa que el mundo haya conocido. Te escribo esta oración para que sepas que siempre estaré contigo, aun en los momentos más difíciles.
Comprender el dolor
Comprendo que el mundo a veces puede ser cruel y que los problemas pueden ser demasiado para soportar. Puede que sientas que no hay nadie ahí para ayudarte, que no hay nadie a quien acudir. Pero, mi hija, siempre estaré aquí para ayudarte y darte el amor y la comprensión que necesitas.
Un lugar seguro
Sé que hay veces que te sientes triste y sola. Pero, recuerda que mi casa siempre será tu hogar, un lugar seguro y acogedor. Aquí siempre encontrarás amor y comprensión, y también un lugar para descansar y recargar energías.
No te des por vencida
No te des por vencida cuando las cosas se pongan difíciles. Recuerda que tienes la fuerza y la valentía para superar cualquier problema. Incluso en los momentos más difíciles, recuerda que tienes una familia a tu lado que te apoyará incondicionalmente.
No tengas miedo de pedir ayuda
Recuerda que no hay nada de malo en pedir ayuda. Siempre hay personas dispuestas a escuchar y a ayudar. Así que, no tengas miedo de hablar con alguien de confianza cuando necesites un poco de apoyo.
Acepta tus sentimientos
No te sientas mal por tus sentimientos. Es normal que a veces sientas tristeza, enojo, ansiedad o cualquier otro sentimiento. Acepta que es normal sentirse triste de vez en cuando y sé amable contigo misma.
Aprende a soltar
A veces es necesario soltar lo que nos hace daño. Aprende a dejar ir las cosas que no te hacen bien. Puedes hacerlo de muchas maneras, como escribiendo tus sentimientos, practicando la meditación o haciendo ejercicio.
Haz algo que te guste
Recuerda que hay muchas cosas buenas en la vida. Por eso, intenta encontrar algo que te haga feliz y divertirte. Puedes ver una película, leer un buen libro, pasar tiempo con tus amigos o hacer algo creativo.
Mantén la esperanza
No pierdas la esperanza. Recuerda que siempre hay luz al final del túnel. Siempre hay una forma de superar los problemas. No dejes que los problemas te abrumen, mantén la esperanza y sé fuerte.
Eres amada
Recuerda que eres amada, querida y respetada. Siempre tendrás un lugar seguro donde sentirte querida y aceptada. Y sobre todo, recuerda que siempre tendrás mi amor incondicional. Te quiero mucho, mi hija.
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